Cuando tenemos nuestra primera mascota a veces nos sentimos como «padres primerizos» porque no reconocemos algunas de sus actitudes ni cambios corporales. Lo que debemos saber es que cuando tenemos una mascota desde su nacimiento debemos concurrir seguido al veterinario para un chekeo y la administración de vacunas correspondientes. La medicina veterinaria suele ser preventiva y apunta a la detección precoz de posibles patologías.
¿Cada cuánto hay que llevar a la mascota al veterinario?
Los más pequeñitos deberán asistir frecuentemente hasta terminar su plan sanitario, los animales adultos deben ir al menos una vez al año (siempre y cuando gozen de buena salud).
¿Qué tipo de chekeos realizar?
Por lo general el veterinario hará un examen clínico completo y si es necesario solicitará estudios complementarios como análisis de sangre, orina, placas radiográficas, ecografías, etc.
Síntomas para estar alerta:
Cambios de conducta habitual, gemidos o aullidos, pupilas dilatadas, rengueras, anorexia (disminución o falta de apetito), pérdida o aumento de peso, inactividad, comportamiento agresico, abdomen dilatado, edema facial (alergias), tos, dificultad para respirar.