Cuando somos científicos o simple estudiantes de medicina necesitamos de un lugar en especial para llevar adelante nuestras actividades, un lugar que nos otorgue todas las facilidades materiales para poder analizar y modificar ciertas experimentaciones. Nos referimos al laboratorio; este lugar es la segunda casa de todos los científicos ya que pasan allí gran parte de su tiempo estudiando e investigando, pero es verdad también, que para llevar a cabo sus investigaciones necesitan de materiales de laboratorio muy específicos.
Elementos indispensables: existen miles de elementos que podemos utilizar dentro de este lugar, desde balanzas analíticas hasta tubos de ensayo, pasando por quemadores y microscopios; algunos serán conocidos mientras que otros nos resultarán algo peculiares, ya que se emplean para realizar investigaciones un poco más complejas. No importa cuál sea el material, cada uno de ellos posee una función específica que nos ayudará a desarrollar nuestra actividad.
Materiales de laboratorio básicos
Existen dos tipos de materiales de laboratorio, los básicos y los que son mucho más complejos y específicos, entre los primeros encontramos 4 subdivisiones: los materiales de medición, de calefacción, de soporte y los que se catalogan como varios. Dentro del primer grupo encontramos la balanza de precisión, la cual se encargará de medir masas de sustancias sólidas. La bureta la cual se emplea para medir volúmenes de soluciones que reaccionan ante la combinación con otra solución; el papel de pH, encargado de medir la acidez de una solución. La pipeta y la probeta; ambas se utilizan para medir volúmenes de líquido, la diferencia reside en que la pipeta suele ser mucho más exacta. Por último dentro de los materiales de laboratorio de este rubro encontramos el termómetro, el cual, como ya sabemos mide la temperatura.
Dentro de los elementos de soporte encontramos el broche de madera que sirven para sujetar los tubos de ensayo, la doble nuez que se utiliza para sujetar el aro de Bunsen, la gradilla en la cual se apoyan los tubos de ensayo. Contamos también con dos tipos de pinzas; para balón y para crisoles, la primera, como su nombre lo indica sujeta el balón; mientras que la segunda los crisoles. Tenemos también el trípode en el cual se apoya la tela de amianto, y el triángulo de pipa que se usa para sostener el crisol mientras se lo somete a la acción del mechero. Por último, contamos con el soporte universal el cual se emplea dentro del armado de varios equipos de laboratorio.
Dentro de la gama de materiales de laboratorio que se refieren a la calefacción, encontramos muchos artefactos; los que más se utilizan son los balones, el común y el de destilación. El primero sirve para calentar líquidos cuyos vapores no pueden estar en contacto con la fuente de calor, mientras que los de destilación sirven para calentar líquidos que luego deben expulsarse por una salida lateral. El laboratorio debe contar también con una estufa eléctrica, un pequeño medio de calefacción útil para la esterilización y para secar sustancias; el mechero de alcohol como el mechero de Bunsen son fuentes de calor muy utilizadas dentro de este ambiente. A su vez se utilizan refrigerantes para condensar los vapores que intervienen en los procesos de destilación; los vasos precipitados son los que utilizaremos para preparar las sustancias que vamos a analizar o con las que vamos a experimentar. Dentro de los materiales básicos también contamos con las cápsulas de porcelana como con el cristalizador; la primera sirve para calentar o fundir sustancias, mientras que el segundo para realizar los procesos de evaporación. El tubo de ensayo es el material más conocido de todos los laboratorios, sin éste no podría realizarse casi ningún tipo de actividad, se emplea para disolver, calentar o hacer reaccionar diversas sustancias.
Por último, dentro de los materiales de laboratorio encontramos con aquellos que pueden utilizarse dentro de alguno de nuestros experimentos; entre ellos están la campana, la cual se utiliza para evaporar sustancias tóxicas. El embudo, útil para trasvasar líquidos de un recipiente a otro; las varillas de vidrio, las cuales se usan para mezclar o agitar las sustancias; también está la propipeta, la utilizamos con el fin de evitar succionar con la boca líquidos nocivos. La escobilla es la que usaremos cuando terminemos las experimentaciones, con ella limpiaremos los restos de material; por último está el papel de filtro que se utiliza para filtrar en conjunto con el embudo.