La Ola de Calor comprende una sucesión de días de naturaleza excesivamente húmeda y calurosa; es el deber, durante este período, del Servicio Nacional de Meteorología de alertar al público y enseñarle medidas preventivas y de auxilio.
El índice de calor es la temperatura en grados Fahrenheit que expresa el calor cuando la humedad relativa es sumada a la temperatura atmosférica. Este índice de calor puede aumentar 15°F en la exposición directa bajo el sol.
La ola de calor puede causar al cuerpo:
(1) Calambres (dolor y espasmo al forzar el músculo en un ambiente de temperatura excesiva).
(2) Agotamiento (sudor excesivo ante trabajo intenso muscular; la irrigación sanguínea se hace necesaria en la piel, disminuyendo la cantidad de sangre en los órganos vitales, lo que puede desembocar en shock/insolación).
(3) Insolación/golpe de calor (el sistema que regula la temperatura corporal produciendo sudor comienza a funcionar de manera incorrecta, lo que pone en riesgo la temperatura cerebral; riesgo de muerte).
Prevención del golpe de calor
Durante la ola de calor es preferible no agitar al cuerpo con labores. Si no le queda más remedio, ingiera mucha agua fresca (agua y no gaseosas). Debe beber aunque no sienta sed. Procure mantenerse a la sombra, y en los recintos más bajos, pues el calor sube y la temperatura es más alta cuanto más alto usted se encuentre. Si se siente agitado o mareado, mójese la nuca con agua fría o use un paño de hielo. Si tiene la oportunidad, acérquese a algún sitio público donde exista un aire acondicionado (negocios, bancos, bares, etc.). Con respecto a los ventiladores, si bien no bajan la temperatura del aire, ayudan a evaporar el sudor de su cuerpo, aliviándolo.
Use ropas de color claro y de tela delgada.
Coma liviano, y distribuya la comida en los momentos del día.
Señales de peligro por golpe de calor
Agotamiento: mareo, piel fría, palidez extrema o rostro sonrojado; puede llevar a dolor de cabeza, náusea, vómito.
Insolación: la piel aumenta de temperatura, y toma color rojo; irritabilidad, respiración agitada, pulso débil pero acelerado; puede desembocar en desmayo.
Primeros auxilios ante ola de calor
La víctima de golpe de calor debe ser llevada a un lugar fresco y puesta en posición cómoda. Debe ingerir agua lentamente a razón de un vaso cada quince minutos (nunca alcohol ni líquidos con cafeína, como té o café). Debe ser desprendida de ropas inútiles, y refrescada con paños mojados. Aire acondicionado es indicado, pero si no existe en el entorno, usar ventiladores eléctricos o abanicos.
Recuerde que la insolación encierra un peligro de muerte, sobre todo para niños y gente mayor. Es posible que la víctima rechace el agua o vomite, o pierda la conciencia de la realidad.