Existen ciertas estaciones del año que suelen inspirar diferentes sensaciones y emociones; el verano es para muchos un sinónimo de divertimento, relax y vacaciones; el invierno puede ser para muchos una época de añoranza ya que los días suelen ser oscuros y fríos y acumulamos mucha más fatiga y cansancio.
Pero de todas las estaciones la primavera es siempre las más esperada por todos nosotros, y esto se debe a que los días comienzan a cambiar, a templarse, vemos el sol con mucha más frecuencia, y los sentimientos más profundos parecen renovarse y surgir a la luz. Es nuestra energía, que vuelve.
Aunque existe una definición técnica para describir la primavera, no se llega a su esencia a través de ésta; podemos decir que es una estación del año que se caracteriza por ser templada y en donde las flores se abren de manera continua. Pero la primavera es mucho más que una estación, es sinónimo de juventud, vida, aire fresco, sol y todo lo que aporte coloridos; en esta época del año vemos todo con mucho mayor vigor, frescura y hermosura.
¿Qué es la «primavera» realmente?
Su nombre proviene de la unión de las palabras “prime” y “vera”, la primera significa “buen tiempo” y la segunda “verde”. La primavera es la estación del año que prosigue al invierno y precede al verano y, la llegada de esta estación se manifiesta en el hemisferio sur recién el 21 de Septiembre. Para esta fecha, en el hemisferio norte comienza el otoño, justo al revés.
La primavera posee características muy singulares, una de ellas es el aumento de temperatura y de las horas de luz. Dichas características sólo pueden notarse en países de latitud media o alta; en las zonas ecuatoriales no se habla de primavera ya que sólo poseen dos tipos de climas: los húmedos y los secos, cada uno de ellos dividido en 6 meses haciendo que el día y la noche dure lo mismo. La primavera se caracteriza también por ser breve en las áreas antárticas y árticas, ya que aquí lo que predomina constantemente es el fuete frío. Durante este período los animales abandonan su tiempo de hibernación, dejando sus madrigueras, y se reintegran a sus hábitats; las plantas, por su parte, renacen llenándose de hojas y flores paulatinamente.
Este período influye en demasía sobre las conductas de los hombres y mujeres por igual: sociólogos y psicólogos afirman que el enamoramiento, las alergias y la euforia se hacen presentes particularmente en la primavera.
A su vez, la misma puede llegar a provocar en algunas personas cambios biológicos; las causas son muchas y muy variadas, desde la radiación solar y los cambios meteorológicos, los cuales afectan a la producción de hormonas, hasta la el abundante polen en las flores. Existe un mito que asegura que durante la primavera la gente renace y se enamora, el mismo cuenta con una base histórica que proviene de las sociedades agrarias las cuales tenían una relación muy estrecha con la naturaleza. Tiempo atrás se decía que como la tierra debía dar frutos, las mujeres necesariamente debían dar hijos, de allí se realiza la asociación con los cambios hormonales.
Festejos y actividades para el día de la Primavera
El día de la primavera suele festejarse de distintas formas alrededor del mundo, Argentina es el país que más énfasis pone a la hora de hacerlo; el 21 de septiembre todos los jóvenes se reúnen en parque o plazas con el objetivo de pasar un buen rato y compartir el día. En esta celebración se estilan los picnics, los juegos al aire libre y las famosas “guitarreadas”; aunque el evento parece sano, fue deformándose con el tiempo al incluir bebidas alcohólicas; fue entonces en donde empezaron los desmanes, la violencia y la acumulación de basura.
Alergias Estacionales
La primavera también se caracteriza por ser una temporada en donde surgen las alergias, y esto se debe a las plantas y los árboles. El polen es transportado a través del viento o de insectos, esparciéndolo por doquier, las personas que lo captan sufren de severas alergias tales como la rinitis y el asma. Otros de las consecuencias más claras son los estornudos, la picazón de ojos, de mucosas, la dificultad para respirar y los silbidos en el pecho; para evitar estos males debemos consultar con un alergista antes de que se acerque dicha estación, éste nos aconsejará cómo evitar las alergias disfrutando de la estación más popular del año.