La basura tecnológica es toda aquella que proviene de los desechos de las computadoras, de los celulares, de televisores, de reproductores de música, y de electrodomésticos inteligentes que se desechan a diario en el mundo, y que han sido consumidos por las personas. Todo lo que se obtiene a partir del reciclado, necesita de un procedimiento específico y puntual, ya que si no se lo hace podría causar un impacto ambiental sin precedentes.
Existen organizaciones como la ONU (Organización de las Naciones Unidas), que han emitido informes acerca del peligro de este tipo de basura, explicando el impacto en la salud de los pobladores. En estos momentos a nivel mundial estamos frente a un boom de uso de las nuevas tecnologías, con aparatos electrónicos, y eléctricos, que al ser desechados al tornarse inútiles, se convierten en chatarra, a esto se le llama basura tecnológica o también conocida con el nombre de basura o chatarra electrónica.
En los últimos tiempos, los precios de los ordenadores, teléfonos celulares, y otros aparatos eléctricos, han decrecido de manera abrupta, es por ello que no es raro que los usuarios los abandonen antes de la llegada de su final de ciclo de vida útil, para obtener aparatos nuevos, con nuevos programas y aplicaciones. Esto hace que la basura electrónica crezca a pasos agigantados.
Una amenaza al medio ambiente
Es importante que sepamos ante todo, que la basura tecnológica, origina una serie de inconvenientes determinados que debemos detallar a continuación:
En principio, estos residuos son altamente tóxicos, por contener entre sus componentes cromo, plomo, mercurio, cadmio, selenio, arsénico, entre otros, que van generando agentes tóxicos en la tierra y en el aire.
Todos estos contaminantes se encuentran en las soldaduras de los aparatos electrónicos, como por ejemplo el estaño; en los cables hay cobre en grandes cantidades, aluminio, hierro, silicio, níquel. En las baterías, en los cristales, en los circuitos de cada uno de los elementos que desechamos siempre hay algún material nocivo.
Sí, la basura tecnológica, emite gases contaminantes a la atmósfera, toxinas, contaminando el agua, y el suelo en el que vivimos. Y toda esa basura presenta amenaza al medio ambiente, y existen, por ende, riesgos sanitarios severos. Se han llevado a cabo estudios muy profundos para determinar el alcance de este tipo de contaminación, los que han arrojado que cada año tenemos acumulado en basura tecnológica en el mundo entero unas cincuenta millones de toneladas.
Un último dato interesante, es que parte importante de esa cantidad, está acumulada en China y Japón.